Los productos del mar en general, y los cefalópodos en particular, son para nosotros el calamar de cada día. Pero no por estar cómodos en el entorno nos resulta más fácil. Para el proceso creativo del desarrollo de una marca independiente de una gran pesquera, tuvimos que ahondar en nuestro talento más oriental para darle la personalidad buscada: una marca con una estructura contundente y estética nipona que nos acerque más al público asiático. Con este objetivo en mente creamos un logotipo descaradamente vertical que rinde homenaje al sentido de la lectura japonesa, de arriba a abajo y de derecha a izquierda, con una tipografía rotunda y un elemento gráfico que fusiona de forma simbólica un calamar y el peculiar anzuelo típico de la pesca de esta especie. El conjunto luce una paleta cromática en la que no podía faltar el venerado rojo de esta lejana cultura. Con la certeza de haber recreado en la marca Marconpota esa belleza tan mítica de la tierra del sol naciente, desarrollamos toda su comunicación gráfica sin temor a no encajar en su mercado.
Adaptabilidad gráfica
Una marca con una estructura contundente y estética nipona que nos acerque más al público asiático.